Las hepatitis B y C son importantes problemas de salud que afectan a 325 millones de personas. Son causa de cáncer hepático y producen 1,34 millones de muertes al año.
Las hepatitis B y C son infecciones crónicas que pueden mantenerse asintomáticas durante años o decenios. Al menos un 60% de los casos de cáncer hepático se deben a un diagnóstico y tratamiento tardíos de las hepatitis B y C.
La baja cobertura de las pruebas diagnósticas y del tratamiento es el problema más importante que hay que resolver para lograr los objetivos de eliminación mundial para 2030.
El diagnóstico y el tratamiento a tiempo de las hepatitis víricas B y C puede salvar vidas.
Lee estos mensajes a través de los carteles de la campaña: